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| From Utopia Cerebral |
En un receso en mi trabajo fui a la cita con mi doctor. Recuerdo cuando el me dijo que mi menopausia empezaba, llegue a mi lugar de trabajo con una sonrisa de extremo a extremo... mis companeros querian saber la causa de mi Mona Lisa sonrisa, y yo solo les dije: hoy soy parte de las matriarcas, hoy deben respetarme! No entendian, como era posible que yo sonriera en semejante circunstancia.
Volviendo al punto original, entendi que era parte del circulo de la vida, todo cambia y yo estaba curiosa con un nuevo cambio que como reloj me apuntaba en otro proceso, otro cambio. Uno de los cambios fue ese fuego, que corria de mi cabeza a los pies, en esos momentos queria quitarme toda la ropa, eventualmente mis companeros de trabajo crearon bromas, chistes acerca de ello. El tiempo paso y aprendi a vivir sin botox, tratamientos para evitar las arrugas, etc. y creci a una nueva etapa en la cual aprendi a regular mis actividades epicureas. Empeze el camino a la moderacion, a la santidad.
Sin embargo hoy, por alguna razon que desconozco, cuando voy de compras los vendedores en los almacenes piensan que soy una estudiante! No me habia dado cuenta, pero ellos me dan rebajas espectaculares. Empece a deliverar para encontrar sentido, al final me di por vencida y decidi tomar ventaja de la situacion (las rebajas)
Aunque no lo crean me dieron un plan -invisible- para mi cell, que solo es para estudiantes! Me venden las manzanas cubiertas de ese dulce rojo a dos por el precio de uno. Precisamente ayer me ofrecieron una Master card con un interes del 9%, que es un plan solo para estudiantes.
Todo esto me hace preguntarme por que todos esos jovenes vendedores ven en mi a una estudiante en Toronto... sera mi ropa, o mi cartera (negra 100% algodon $10.), o sera que transpiro inteligencia a 10 millas de distancia, o sera que me gusta caminar por los lugares mas caros de la ciudad... no lo se! pero hay algo que me gusta, me dan buenas rebajas!
Al final de cuentas ya me siento como el cuento del patito feo, en este caso seria el cuento del patito post-menopausico.
2 comments:
Me alegro de que te confundan con una estudiante. Felicidades, congratulations!
Ja, ja, ja... El relato -real o inventado- es divertido. Yo me parece que estoy también en esa edad, pero dicen que los hombres lo pasan más suavemente, aunque mi travesía de los cuarenta fue harto complicada y a veces dramática.
Un relato tierno y sugerente.
Saludos.
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